Qué hacer con palomas perturbadoras

En el Parque Colón abundan las paolmas 

Por representar uno de los símbolos de la paz y buena suerte las palomas son vistas y acogidas con  beneplácito por distintos grupos de la sociedad.

Son de las pocas especies adaptadas a vivir en las grandes ciudades por la similitud de entorno urbano y los acantilados, dónde estas hacen vida silvestre, por esa razón son catalogadas como un ave doméstica.

Sin embargo, al congregarse en multitud se convierten muchas veces en una perturbación para determinadas personas, especialmente cuando se adueñan de los techos, ventanas y toldos de sus casas o edificaciones antiguas, en las que provocan corrosión o se convierten en fuentes de enfermedades.

De acuerdo con Nelson García, biólogo del Departamento de Regulaciones y Control  de la Dirección de Áreas  Protegidas y Biodiversidad del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, el problema de las palomas es que al ser animales omnívoros  que comen semillas y restos de comida, son atraídas  con facilidad dónde encuentran esa facilidad de alimentación y abundante agua, incluyendo parques y otras áreas verdes.

De ahí que producen gran cantidad de desechos o heces fecales que contienen una sustancia ácida fosfórica y úrica que al transformarse con la alantoína alcanza un alto poder de corrosivo, que además de afectar las paredes de monumentos históricos y mancha los vehículos.

“Debido a la palomina, combinación de las plumas con los excrementos bajo cierta condición de humedad, genera el hongo denominado histoplasma capsulatum que puede afectar las vías respiratorias de las personas asmáticas, por las esporas de ese hongo cuando este penetra desde los acondicionadores de aire dónde ellas se posan”, explicó García tras reconocer que juegan su papel en el equilibrio del ecosistema.

Recomendaciones

Tomando en cuenta que la Ley de Casería 11-2011 prohíbe su caza y envenenamiento, García recomienda a las personas que quieren alejarlas de su entono, que eliminen los comederos y fuentes  aguas.

Sugiere establecer sistemas de pinchos, unas estructuras plásticas que se colocan en las ventanas y lugares dónde estas perchan o posan.

Igual colocar líneas de naylon muy finas, especial para que estas pierdan la estabilidad y emprendan el vuelo enseguida; también pueden crear sistemas de mallas y aluminios que ayudan a repelerlas de los edificios. 

La paz interpretada por una paloma blanca llevando un ramo de olivo en su pico tiene un origen milenario y está fuertemente ligada a la cultura judeo-cristiana. En el Viejo Testamento Noé lanza una paloma blanca con el fin de encontrar tierra tras la inundación, al cabo de un tiempo la paloma regresa al Arca con un ramo de olivo en su pico significando que la inundación había acabado y que por ende Dios estaba de nuevo en paz con la humanidad. Ahora la paloma blanca puede representar dos tipos de paz: Si se la representa con el ramo de olivo en su pico simboliza el deseo de mantener la paz ya alcanzada; mientras que si se la simboliza volando, como por ejemplo en los actos donde se lanza una paloma blanca al aire, simboliza el deseo de alcanzar la paz al enviar un mensajero que la transmita.